TORTILLA CEREMONIAL: COSMOGONÍA OTOMÍ

30 Abr TORTILLA CEREMONIAL: COSMOGONÍA OTOMÍ

Por redacción WiF Magazine

El estado de Guanajuato fue elegido por las deidades otomíes para bendecir la tierra y los alimentos. Así se comprueba en el municipio de Comonfort y el Pueblo Mágico de San Miguel de Allende, donde elaboran la tortilla ceremonial, un legado gastronómico que ha sido heredado de generación en generación para celebrar la vida a través de hermosos sellos diseñados por cada familia, e impresos en cada tortilla de maíz, rindiéndole tributo a la profunda relación que estos pueblos mantienen con sus ancestros.

Las tortillas ceremoniales son un símbolo que representa siglos de historia, una expresión del universo otomí que mantienen un lazo íntimo con la naturaleza. Por ello los sabios de estos pueblos conversan con todos los elementos que conforman la Pachamama, para mantener la armonía y la abundancia en su vida cotidiana.

Elaborar tortillas ceremoniales es todo un rito. Conlleva un delicado proceso, desde la selección de los granos de maíz, que son heredados por generaciones posteriores, hasta la siembra del mismo durante la luna llena, que se hace al compás de una serie de oraciones para mantener la armonía en el campo.

Posteriormente, con la cosecha de maíz nixtamalizada, las cocineras tradicionales encienden la leña y montan el comal para que se caliente mientras realizan cánticos en otomí, siempre dedicados a la familia. Al mismo tiempo elaboran un “lele”, que es un trocito de masa con forma de un bebé, porque según las cocineras tradicionales, donde hay bebés hay armonía y amor.

Así comienza la ceremonia en el fogón, en el comal, por ello las cocineras tradicionales afirman que cada vez que cruje la leña encendida significa que las ánimas están presentes,  que es momento para compartir las enseñanzas acerca del amor a los semejantes, a la fraternidad.

Ya con la temperatura ideal se tortea la masa para hacer la tortilla y se cuecen un poco; posteriormente se tiñe el sello con un colorante natural que se extrae de una planta llamada muicle.

El sello es un cuadro de madera de mezquite, que es heredado por cada generación a su descendencia con la finalidad de que la hija seleccionada recuerde a sus antepasados y mantenga vivas las tradiciones de los pueblos en cada fiesta, como puede ser la presentación de un bebé ante la iglesia, una boda, un fiesta patronal. A ello se debe que cada símbolo es diferente, diseños que pueden ser cruces, ángeles y heraldos, hasta mazorcas de maíz.

Ahora viene la parte de la comunión con la cosmogonía otomí, cuando sale la primer tortilla que será entregada al festejado después de haber sido depositada en un tortillero que se encuentra sobre un manojo de ramas de pirul, un árbol considerado como un protector espiritual y un remedio en la medicina tradicional mexicana.

Así, entre bocado y bocado, la tortilla cumple su función de satisfacer el apetito del alma, porque cada vez que alguien da un bocado con esta tortilla ceremonial come recuerdos, tradición y fraternidad.

GUERRA DE LOS CRISTEROS

Durante la guerra cristera fue prohibida esta tortilla por considerarse resistencia a la Ley Calles. Se cuenta que las personas que tenían los sellos con insignias religiosas eran colgadas, asesinadas. Incluso hay anécdotas de algunos abuelos que tuvieron que enterrar los sellos durante la “Guerra de los Cristeros” para que éstos no fueran ejecutados.

SALSA RITUAL

Parte importante del ritual es la salsa de chile martajado, que se sirve con mazorcas de elote, que simbolizan la ayuda, el agradecimiento y la abundancia en la mesa. Es el cierre de un ciclo al compartir con otros los frutos de la misma cosecha.

MUICLE

El tinte que utilizan lo extraen de la planta muicle. Planta domesticada que sirve para hacer curaciones y aliviar el dolor de estómago, cólicos.

Estas flores también llamadas toritos son molidas e infusionadas para extraer un tinte que pinta de rosa o morado en cada sello. También es muy común ver colores rojos por la grana cochinilla e incluso diferentes tonos, todos hechos con ingredientes naturales.

EL SELLO

Los moldes de madera para tortillas son sumamente apreciados entre las cocineras otomí, se heredan de madre a hija y entre más antiguos, más valiosos. La madera con más valor para este tipo de instrumentos, es la del mezquite.

Actualmente cada familia puede elegir el sello que desee, para que tenga su propio significado. Cada uno es diferente, según la celebración y la familia. El más importante es el de la Santa Cruz, la fiesta más grande de su comunidad, pero también hay alusivos a la flora y fauna local, como colibríes o flores.

EMBAJADORA DE LA CEREMONIA DEL MAÍZ

Consuelo Venancio es la cocinera tradicional más famosa de Guanajuato, heredó de su madre la responsabilidad de cuidar el sello familiar. Con éste y otros que ha ido labrando, se dedica a cocinar y hacer tortillas en su lugar de origen, en un pueblo llamado Delgado de Abajo, en el municipio de Comonfort. Pero Consuelo se ha vuelto una embajadora y portadora de la palabra para compartir este conocimiento por todo el mundo a través de talleres y cursos alrededor del mundo.

“Donde hay hñähñús hay tortilla ceremonial, hay amor y hay oportunidad de escuchar a la tierra a ya nuestros antepasados”.