CRAZY BEAR: HOSPEDAJE EL ESTILO HUGH HEFNER

CRAZY BEAR: HOSPEDAJE EL ESTILO HUGH HEFNER

Por Alex Robledo

A los fiesteros les encantarán los hoteles Crazy Bear, dos complejos de hospedaje donde seguramente Hugh Hefner se hubiera sentido como en casa: se trata de suites de alta gama, con terciopelos, espejos en el techo, tinas de bronce frente a la cama, 25 tipos de champán a la carta, fiestas sin límite ¡Un sitio para liberar tu espíritu animal.
“Ríndete a la indulgencia, descubre nuevos gustos, experimenta lo inesperado”, así reza la frase de la empresa Crazy Bear en su website, un pequeño grupo hotelero que ha decidido crear dos espacios para huéspedes que gustan por experimentar nuevas cosas. Hospedaje extravagante, pero al mismo tiempo discreto, perfecto para vivir idilios y pasión en un mundo vintage.

El primer hotel que levantó persianas es The Crazy Bear Beaconsfield, que se ubica en Stadhampton, Londres, inaugurado en 1993. El segundo es el hotel Crazy Bear de Beaconsfield, que abrió sus puertas en el año 2008, ocupando una posada del siglo XV,
Los dos hoteles han sido intervenidos con una decoración singular, como cortinas doradas y papel tapiz de terciopelo color mostaza, sitios que hasta hoy día no han dejado de organizar fiestas para viajeros con buena cartera. No es un hotel para llegar ataviado con cardigans, porque Crazy Bear es visitado por personas influnceres raros, que llegan con ropa de diseños locos, con telas animal print para impresionar a sus millones de seguidores de Instagram.

Las dos propiedades fueron creadas como si se tratara de enaltecer la forma de vida de las antiguas tribus que comercializaban pieles en el siglo XIX. Por ello la mezcla del diseño tiene un ambiente victoriano. Las cortinas de terciopelo, las vigas de madera, las cabeceras de las camas forjadas en latón o recubiertas en cuero con destellos dorados dan la impresión de que esa noche será dispuesta para amar al estilo Drácula.
Su extravagante diseño sugiere un baño de burbujas enfrente de la cama. Sí, tal como lo lees, las suites tienen una bañera ya sea de cobre o de cerámica blanca justo en la parte frontal de las camas.
El principal material que usaron Jason Hunt y Alma (los diseñadores del hotel) fue el cuero; no sólo en las sillas y sillones sino también en las paredes, en los techos y en el armario. Ambiente dispuesto para el sadomasoquismo.

BACANALES CON ESTILO

Para mayor privacidad, se puede armar una cena en la habitación para experimentar un auténtico bacanal, obvio con una botella de champaña o un bloody mary si apenas acaba de salir el sol.
En ambos hoteles la gastronomía es ejecutada por jóvenes chefs que sirven sensacionales platos de temporada, pero siempre ofreciendo una experiencia de lujo centrada en la cocina británica moderna.

Pero hay que estar atentos a otros centros de consumo, porque también cuentan con cocina tailandesa, pub con snaks de autor y otros rincones que permiten dosfrutar de su gastronomía al aire libre, incluyendo pool party.
The Crazy Bear es ya una firma de venues de fiestas, para para ver y ser visto. Con noches atascadas de eventos temáticos, como noches burlesque, de cabaret, dj´s invitados, todo al original estilo Playboy.

www.crazybeargroup.co.uk

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