24 Abr SAKE SUSHI BAR: OMAKASE, DISEÑO Y SOFISTICACIÓN
Redacción: Watch it First
En la CDMX, en el subterráneo del singular edificio Qúbica, diseñado por Colonnier Arquitectos, se encuentra Sake Sushi Bar, un restaurante de comida japonesa que ejecuta un gran omakase en la más grande y tradicional barra japonesa que existe en México, con 17 metros de longitud.
El menú del restaurante es amplio, hay diversas opciones. Las entradas se conforman por platillos tempura, rollos primavera y dumplins; pasa por sopas miso, noodles y tofu; ensaladas que incluyen diversas proteínas y condimentos especiales asiáticos; hasta llegar a los nigiris, sashimis, rolls, teruyakis, arróces, fideos y ¡Donburi!
La carta es bastante singular, olvida las combinaciones mexicanas, aquí se respeta la receta, con uno que otro twist para hacerla más divertida, como los rollos con ingredientes diferentes, combinaciones bien ejecutadas, incluso rollos estilo boricua.
Moises Haim, es el creador y de este sushi bar que se incorporó a la escena gastronómica de la capital para compartir auténticas recetas de la cocina nipona bajo un estilo de hospitalidad basado en el servicio personalizado, maestría en la ejecución de la cocina y la inclusión de ingredientes de gran calidad.
El diseño del espacio es de tipo contemporáneo, pero cálido y elegante; la barra, la pared de cristales y la mezcla de maderas con concreto transmite armonía, una sensación muy nipona.
EXPERIENCIA WATCH IT FIRST
Decidimos vivir la experiencia de un auténtico omakase, un momento de genuina complicidad entre chef y comensal, donde pudimos conocer y disfrutar de un menú diseñado por el maestro iatamae -el chef- bajo pura inspiración.
Comenzamos con la alcachofa con salsa miso yuzu, una bomba de sabor que nos ayudó a abrir apetito. Continuamos con gyoza de pesca blanca, demostrando la maestría que se requiere para elaborar este tipo de ravioli típico de la cocina asiática.
La representación del maki en ese momento fue con uno elaborado con atún otoro, Ikura y trufa rayada.
Las estrellas, sin duda, fueron cuatro nigiri especiales: chutoro, Rib eye Wagyu, Ikura, Anguila/Unagui, una oda a la tradición japonesa que nos hizo cerrar los ojos, específicamente cuando lo maridamos con el sake recomendado por el personal del restaurante -cata a ciegas-, servido en recipientes de cerámica, como lo hacen en los auténticos izakaya.
El dulce cierre lo hicimos con un helado de lychee, otro de ¡carbón activado! Además de un raro pero contundente matcha brule.
Dentro de su carta regular, que está basada en la cocina tradicional japonesa encontrarás Nigiris, Makis, Ensaladas, Tempuras, Sopas, Sashimis y Hand Rolls.
Hay una gran variedad de sake, además de tener cervezas japonesas y mixología con espíritu oriental.
- DÓNDE: Volcán 150, Lomas Virreyes, Lomas de Chapultepec, CDMX.
- REDES SOCIALES: @sakesushibarmx
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